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De la gran pantalla al escenario: musicales basados en películas icónicas

Grandes musicales como Chicago o Grease han dado un salto de los escenarios al cine para convertirse en hitos de la cultura cinematográfica. Sin embargo, a veces ocurre lo contrario. Los directores de cine encuentran la inspiración en producciones teatrales donde la música es la gran protagonista. Hoy en día son muchos musicales los que se representan por todo el mundo. En esta Pausa repasamos algunos de los más conocidos.

El Rey León

Disney no sólo es la autora de algunos de los largometrajes de animación más famosos de la historia, también cuenta con un haber de parques de atracciones, merchandising y grandes musicales que abarrotan los teatros. Uno de los más populares, desde Broadway hasta la Gran Vía de Madrid, es El Rey León. Basado en la cinta homónima con melodías de Elton John y Tim Rice, el musical teatral cobró vida solo tres años después del estreno en cines de la película.

Billy Elliot

Este pequeño bailarín revolucionó la gran pantalla allá por la década de los 2000 y también llenó las butacas de todo el mundo. Desde Barcelona hasta Hungría, la producción musical sigue la historia de un niño de clase humilde que descubre su pasión por el ballet luchando contra los estereotipos y las objeciones de su padre. 
Nuevamente Elton John está al frente de esta representación, inspirada en la figura del bailarín Philip Mosley, que está a punto de cumplir un cuarto de siglo.

Ghost. Más allá del amor

Estrenado hace no mucho en los teatros de toda España, el musical Ghost adentra al espectador en una historia de amor y espiritualidad en mayúsculas. En el cine la pareja formada por Sam y Molly (o lo que es lo mismo, Patrick Swayze y Demi Moore) arrancaron muchos suspiros a los espectadores en un drama romántico que se llevó dos Oscar. 

Desde el año 2011 se representa en numerosos escenarios del mundo, desde Australia hasta México con un repertorio que se ha editado en diferentes álbumes discográficos.

Cantando bajo la lluvia

Resultaba prácticamente inevitable que las canciones y bailes del filme de los años 50 no traspasaran la pantalla. La película Cantando bajo la lluvia, interpretada por los inolvidables Gene Kelly, Donald O’Connor y Debbie Reynolds, se escenificó por primera vez en los años 80. Se ha convertido en un imprescindible de Broadway, aunque también se ha dejado ver en Londres, España o Francia, entre otros muchos países.

Amélie

La película de culto de Jean-Pierre Jeunet cuenta con una legión de fans y también con musical propio. Se estrenó unos 15 años después que la película original. La historia es la misma y los decorados, el vestuario y el atrezzo resumen el ambiente del largometraje francés. Pese a ello y a haber cedido los derechos, uno de sus principales detractores es precisamente el director de la película, quien lo califica de “mediocre”. 

En esta ocasión no será Yann Tiersen sino Daniel Messé, junto con Nathan Tysen, quien ponga música al libreto.

Shrek. El musical

El ogro más querido por niños y mayores saltó a las tablas de Broadway en el año 2010. El musical, basado en la película de animación, ha cosechado éxito de taquilla y críticas desde entonces. La producción es bastante fiel respecto a la película e incluye canciones de la banda sonora como I’m a Believer.

Una de las curiosidades es que Julie Andrews, quien puso la voz a la Reina Lillian, también la puso en las instrucciones antes de cada actuación recordando al público apagar sus móviles. 

Sister Act, El silencio de los corderos o Mary Poppins son otras de las películas adaptadas como musicales en el teatro que han ganado popularidad en los últimos años. Fusionando el encanto del cine con la magia del escenario, se han convertido en la oportunidad perfecta para vivir un día en familia o con amigos y disfrutando de la música y las historias en riguroso directo.

¡Aprovecha tu Pausa y cuéntanos cuál es tu musical favorito!