El mundo de la publicidad televisiva es extenso y complejo. Muchos anuncios no solo venden productos, sino que se convierten en iconos culturales. Piezas de apenas unos segundos han conseguido y consiguen dejar una impresión duradera en la mente del espectador. Algunos apuestan por hacernos reír; otros por emocionarnos. Sea como fuere, estas piezas publicitarias han demostrado su capacidad para trascender el propósito comercial y convertirse en verdaderas joyas de la cultura popular. En esta Pausa, exploramos algunos de los anuncios de la televisión que marcaron a los espectadores.